Canine babesiosis or piroplasmosis
transmitted by ticks
Canine babesiosis or piroplasmosis
Canine babesiosis or piroplasmosis is a vector-borne disease caused by a protozoan parasite, Babesia spp. Different species of Babesia can be transmitted by the bite of different ticks such as Dermacentor, Rhipicephalus and Ixodes. The parasite develops in blood cells and can cause anemia. Dogs affected by babesiosis are suffering from a high fever, general weakness, loss of appetite and dark or brown colored-urine (sometimes like coffee). The disease generally occurs very quickly and can be fatal for infected dogs. It is a disease requiring urgent diagnosis and treatment. Some Babesia species such as B. microti can be zoonotic.
Furthermore, with one single bite ticks can transmit several pathogens so it worsens the clinical picture.
Here are the 3 recommendations you can leverage to protect your dog:
• Reducing the dog exposure to tick bites: carefully check the possible presence of ticks on your dog after every walk and remove them with care as soon as possible.
• Use a product that repels and kills ticks with proven efficacy.
• Discuss vaccination, when available, with your veterinarian.
Geographical distribution
The incidence of babesiosis in dogs is evolving. Babesia canis was shown to expand its distribution over new geographical territories such as UK (2017) and Denmark (2019). The ornate dog tick (Dermacentor reticulatus) is responsible for its transmission and is one of the fastest-spreading tick species in Europe. In many countries, canine babesiosis is considered as an emerging infectious disease.
The more you know, the better you can protect your dog. Keep up-to-date to know if you live or plan to travel in a babesiosis risk area by checking the real-time babesiosis world map.
Discover more about tick-borne diseases such as canine babesiosis with Pr Lukasz Adaszek (University of Life Sciences in Lublin, Poland).
Canine babesiosis or piroplasmosis map
La información contenida en este sitio web se proporciona "literal", "según esté disponible", y Ceva no otorga ni hace ninguna garantía o representación de ningún tipo, ya sea expresa o implícita, incluyendo, sin limitación, cualquier representación o garantía de la exactitud, fiabilidad, calidad, vigencia, cronología, disponibilidad o exactitud de dicha información. <br><br> Nada en este sitio web constituye, o pretende constituir, asesoramiento de ningún tipo. Si el usuario requiere asesoramiento, debe consultar a un profesional adecuado. <br><br> El uso de este sitio web es por cuenta y riesgo del usuario. En la medida máxima permitida por la ley, Ceva no será responsable de ninguna pérdida o daño de ningún tipo y de cualquier manera que surja directa o indirectamente (incluida la pérdida o daño especial, incidental o consecuente) como resultado del uso o la confianza del Usuario en la información contenida en el sitio web, incluida cualquier pérdida, daño o gasto que surja de, entre otros, cualquier defecto, error, imperfección, falla, error o inexactitud con este sitio web y su contenido. <br><br> Todos los materiales publicados en este sitio web están actualizados a la fecha de publicación. Ceva no tiene la obligación de mantener actualizada la información o el material proporcionado en este sitio web. Ceva puede cambiar la información, el material y el contenido proporcionado en las páginas del sitio web en cualquier momento y sin previo aviso.
Conoce más acerca de estas enfermedades
Babesiosis (Babesia spp.)
La babesiosis canina es una enfermedad transmitida por vectores causada por un protozoo llamado Babesia spp. Las garrapatas son las principales transmisoras de estos parásitos. Existen diferentes especies de Babesia y pueden requerir diferentes protocolos terapéuticos. La distribución de las especies está altamente relacionada con la distribución de sus respectivos vectores. Por ejemplo, en Europa, las garrapatas del género Dermacentor son las que transmiten B.canis, una enfermedad que se está expandiendo.
Lyme borreliosis (Borrelia spp.)
Canine Lyme borreliosis is a Vector-Borne Disease caused by Borrelia spp. bacteria transmitted by Ixodes ticks.
Different species of Borrelia can be involved depending on the geographic location.
For example, while only B. burgdorferi sensu stricto was found in North America, many other species can infect dogs in Europe.
Dogs are not a competent reservoir of the pathogen but they represent a useful sentinel reflecting the risk of infection of their owners.
Dirofilariosis cutánea (Dirofilaria repens)
La dirofilariosis cutánea es una enfermedad transmitida por vectores zoonótica producida por un nematodo llamado Dirofilaria repens. Los mosquitos transmiten este parásito a través de su picadura. Los cánidos son su mayor reservorio. Aunque generalmente no se considera una gran amenaza para la salud, es una enfermedad zoonótica.
Dirofilariosis cardiopulmonar (Dirofilaria immitis)
La dirofilariosis es una enfermedad transmitida por vectores que puede llegar a ser mortal causada por un nematodo llamado Dirofilaria immitis. Los mosquitos transmiten este parásito a través de su picadura. A pesar de los considerables esfuerzos que se realizan para su prevención, esta enfermedad sigue expandiéndose por diferentes zonas del mundo.
Leishmaniosis (Leishmania infantum)
La Leishmaniosis visceral canina es una enfermedad transmitida por vectores causada por un protozoo llamado Leishmania infantum. Aunque existen otras vías de transmisión posibles, este parásito se transmite principalmente a través de la picadura de los flebotomos. Es una enfermedad zoonótica grave que se está expandiendo por todo mundo.
Anaplasmosis (Anaplasma spp.)
La anaplasmosis canina es una enfermedad transmitida por vectores causada por una bacteria intracelular (Anaplasma phagocytophilum o A. platys). Las garrapatas del género Ixodes son las que transmiten este patógeno. Los primeros signos clínicos se pueden observar después de un periodo de incubación de 1- 2 semanas después de la picadura.
Ehrlichiosis (E.canis)
La ehrlichiosis canina es una enfermedad transmitida por vectores causada por una bacteria intracelular (E.canis). Las garrapatas del género Riphicephalus sanguineus suelen transmitir este patógeno. La transmisión puede ocurrir en tan solo 3 horas desde la infestación. Los signos clínicos pueden llegar a ser graves. Su prevención se centra en establecer un buen control frente a las garrapatas.